Durante la ceremonia del 65 aniversario, la directora general de Cómicos de la Legua, Paty Murillo, destacó la importancia del Atrio de Santa Rosa de Viterbo como el lugar donde nació la compañía y la trascendencia de los fundadores Hugo Gutiérrez Vega, Roberto y Juan Servín, y Paco Rabell, quienes hicieron posible este legado cultural. Agradeció a las generaciones de actores que han mantenido viva la tradición teatral y celebró el reciente reconocimiento de Cómicos de la Legua como Patrimonio Cultural Inmaterial del Estado de Querétaro.
“Hoy, celebramos no solo 65 años de Cómicos de la Legua, sino 65 años de la voz del teatro queretano, de la entrega a los escenarios, de la conexión con nuestro público, de llevar historias y emociones a los barrios, colonias, municipios, ranchos, ejidos, aldeas y rincones de todo Querétaro y más allá. Hoy, renovamos nuestro compromiso de seguir creando, compartiendo y viviendo el teatro, como lo hemos hecho desde nuestros primeros pasos en este atrio”, comentó.
Durante la noche, el público disfrutó de la presentación de dos grandes obras: La Guarda Cuidadosa de Miguel de Cervantes dirigida por Víctor Mendoza y Farsa y Justicia del Señor Corregidor de Alejandro Casona, bajo la dirección artística de Víctor Sasia; además acompañados por los romances castellanos dirigidos por Carlos Baca. También, se llevó a cabo la develación de una placa conmemorativa en honor a estos 65 años de historia.
El evento contó con la participación especial de la Estudiantina de la UAQ, añadiendo un toque musical a la velada, y resaltó la importancia del teatro en Querétaro, sino también la dedicación y el compromiso de Cómicos de la Legua para enriquecer la vida cultural de la comunidad queretana.
Vale mencionar que, del 1 al 4 de septiembre, en el Mesón de Cómicos de la Legua y con la participación de más de 75 actores, se presentaron diversas obras como parte de la conmemoración del 65 aniversario del grupo teatral. Entre las destacadas puestas en escena estuvieron: “La Fablilla del Secreto Bien Guardado” de Alejandro Casona, “Tierra de Jauja” de Lope de Rueda, y “El Juez de los Divorcios” de Miguel de Cervantes, entre otras.
