Autoridades municipales de Querétaro han identificado entre 150 y 250 ambulantes que operan en el centro histórico, de manera irregular.
Mediante un comunicado, señalaron que, según la temporada, la cifra varía principalmente en épocas de mayor afluencia, como las festividades o vacaciones, cuando el número de comerciantes informales aumenta significativamente.
A pesar de la constante presencia de 54 inspectores dedicados a inhibir esta práctica, la cantidad de vendedores en las calles sigue siendo considerable.
Las autoridades reiteraron que ninguno de estos comerciantes cuenta con permiso oficial para vender sus productos.
Entre los artículos que se comercializan destacan muñecas, moños, diademas y esculturas de barro, muchos de ellos provenientes de estados como Chiapas, Oaxaca, Querétaro (especialmente de la zona de Amealco) y Guerrero.
Además, se ofrecen productos electrónicos, sombreros y bolsos, algunos de ellos de origen chino.